¿Te acuerdas de Frank Borghi?

- Continuemos con otro de aquellos héroes que hicieron historia en el Mundial de Brasil en 1950. Éste fue el guardián del marco estadounidense, un auténtico patriota norteamericano que actuaba siempre con pundonor y motivado por el gusto a los deportes de conjunto. También su personaje aparece en el largometraje "El partido de sus vidas", el cual recomiendo a todos los enamorados de este deporte.

Era de ascendencia italiana, pero nació en Saint Louis, Missouri (EE.UU.), el 9 de abril de 1925. Frank Borghi siempre quiso jugar al béisbol, pero el fútbol se cruzó en su camino. Antiguamente era un deporte de invierno y muchos jugadores lo utilizaban para mantener la forma. De esta manera, y fascinado por ese deporte conocido allí como "soccer", el joven meta estadounidense quiso cambiar su destino deportivo para convertirse en uno de los porteros más recordados en la historia del fútbol norteamericano.

- Se crió en el barrio de The Hill (Saint Louis) junto a otros chicos de origen italiano que más tarde competirían juntos por el equipo de su patria. Charlie Colombo "Guantes", Gino Pariani y Pee Wee Wallace nunca se separaban de Frank, y el fúbol les unió más todavía.
Su familia regentaba una funeraria y Borghi buscaba tiempo para poder hacer deporte con sus amigos. Su primera elección fue el béisbol, llegando a jugar para bastantes equipos de Saint Louis antes de que el fútbol acaparase toda su atención. Borghi era un meta ágil, seguro y con muy buena planta. Su mayor problema era el juego de pies. él mismo sabía que no dominaba esa faceta, por lo que evitaba recurrir a ella pidiendo siempre la ayuda de sus compañeros. Todo lo compensaba con sus increíbles estiradas, sus magníficas salidas aéreas y esa valentía con la que afrontaba cada jugada en contra.
Frank, que se definía como un gran patriota, acudió al reclutamiento voluntario que el gobierno norteamericano realizó tras el ataque a Pearl Harbour en 1942, el mismo que significó la entrada en la Segunda Guerra Mundial de su país. Posteriormente, fue trasladado a Europa para combatir en el frente de batalla. Tan solidarios fueron sus servicios, actuando como médico y enfermero, que fue condecorado con dos “corazones púrpuras” y dos “estrellas de bronce”. Curiosamente, uno de sus rescatados fue ni más ni menos que el célebre locutor de encuentros de béisbol Jack Buck, a quien le salvó la vida, como a muchos otros. Con veinte años regresó de servir a la patria y continuó con su vida anterior, trabajando y practicando sus deportes favoritos.

Descartado el béisbol, Frank ingresó en los Simpkins Ford de Saint Louis. En este equipo sacaría lo mejor de sí mismo iniciando su etapa más laureada en el deporte rey. Con el equipo de Missouri consiguió ganar la Copa U.S Open, denominada igual que el Grand Slam de tenis, en los años 1948 y 1950. En este mismo conjunto, a pesar de que era semi-profesional, logró darse a conocer, y se ganó la posibilidad de acudir al Mundial de Brasil.

Borghi, al igual que sus amigos de The Hill, superó las pruebas para representar a la selección estadounidense en Brasil. Motivado por los servicios de un reportero de deportes, el meta se ganó un sitio en ese aeroplano que les llevaría a tocar la gloria pese a no pasar de la fase de grupos en la Copa del Mundo.
Su labor en el evento internacional fue admirable, especialmente en ese partido frente a Inglaterra que acabó con una victoria norteamericana por 0-1. Los héroes del combinado estadounidense retornaron satisfechos por su gran actuación, cuando muchos no daban un duro por ellos, o en este caso un dólar.

El arquero de Missouri dio sus modestas impresiones sobre aquel histórico partido: “Esperaba poder contenerlos y que sólo marcaran cinco o seis tantos” - explicó Borghi tras la épica victoria sobre la escuadra británica.

Poco después, en el año 1955, fue destacado como “Jugador más Valioso” de la Comisión de Fútbol de Missouri, retirándose al año siguiente de la práctica profesional, siempre en los Simpkins. Entonces Frank se convirtió en director de una funeraria, en la que además había trabajado siendo joven, cuando el sueldo de futbolista no le llegaba.
Apartado definitivamente del fútbol, pero siempre amando ese deporte que tanto le dio, Borghi siguió recibiendo reconocimientos por sus servicios con el equipo nacional, ya que en 2004 volvió a ser galardonado por la Asociación Nacional de Entrenadores de Fútbol de América en su convención anual en Charlotte.

El valiente y siempre admirado guardián de The Hill pereció el 2 de febrero de 2015 con 89 años de edad. Fue enterrado en el Cementerio Nacional Jefferson Barracks en Lemay, Missouri. Al menos pudo llegar a ver esa película en la que aquellos sorprendentes futbolistas, Borghi entre ellos, causaron sensación en la gran pantalla  como ya habían hecho sobre el césped de Belo Horizonte.

Partido entre España y USA con Borghi en el aire, correspondiente a la fase de grupos del Mundial de Brasil 1950.

- Sus números con la selección de los Estados Unidos de América se resume en nueve partidos internacionales, disputados entre 1949 y 1953. Primero empezó jugando para la escuadra norteamericana en partidos de clasificación para el Mundial, así como otros partidos amistosos que sirvieron como preparación.

En Brasil fue el meta titular y jugó los tres partidos de la frase de grupos. Contra los ingleses consiguió mantener su puerta a cero, pero ante España y Chile recibió un total de ocho goles, encuentros que acabaron con resultado de 3-1 y 5-2 respectivamente.